¿Qué es un incendio y cómo se pueden apagar las llamas?
El fuego es un fenómeno natural que puede ser causado por muchos factores. Es el resultado del calor, la luz y la combustión. En este artículo, discutiremos la importancia de la protección activa contra incendios.
Principalmente, un incendio es una reacción de oxidación incontrolada del combustible en presencia de oxígeno, calor y la presencia de una fuente de ignición. Puede producirse un incendio cuando algo que contiene combustible, como madera o papel, se expone al calor o está expuesto a las chispas de un objeto, como una colilla de cigarrillo.
Por lo tanto, los métodos de protección activa contra incendios son la forma más eficaz de apagar incendios porque utilizan agua, espuma u otros productos químicos para extinguirlos. La mejor manera es usar un polvo químico seco llamado Halotron que se puede usar en todo tipo de incendios, incluidos los incendios eléctricos y los incendios sin llama.
No obstante, la protección activa contra incendios significa usar medidas activas para prevenir o extinguir incendios antes de que comiencen o se propaguen. Una forma de hacerlo es mediante el uso de rociadores y alarmas que podrían detectar incendios antes de que se vuelvan demasiado grandes para combatirlos solo con agua.
Así que un incendio es un evento que comienza con la combustión y se propaga a través del calor y la luz. Los incendios generalmente se clasifican en diferentes tipos según lo que los causa:
Incendios eléctricos
Ocurren cuando la electricidad de una fuente de energía entra en contacto con un objeto como un alambre de metal.
Incendios por calor
Estos suceden cuando el material es calentado por un fuego, por lo que puede generar grandes llamas.
Incendios de combustión
Se producen cuando el aire y el combustible se mezclan de forma rápida e incontrolada.
Ciertamente, los incendios pueden ser peligrosos, pero hay maneras de evitarlos y apagarlos. Lo más importante es conocer los sistemas de protección activa contra incendios, de esta manera instalar el correcto para evitar cualquier daño a la propiedad o los integrantes de un edificio.
Sistemas de protección activa contra incendios, ¿por qué necesita uno?
Para empezar los sistemas contra incendios son un tipo de sistema de protección activa contra incendios que funciona detectando la presencia de calor y reaccionando ante él. Pueden detectar la presencia de calor en una habitación, desconectar el suministro eléctrico y activar los rociadores.
Estos sistemas se instalan en lugares como hospitales, escuelas, oficinas, aeropuertos, hoteles, centros comerciales y más. Ya que permiten proteger a las personas de incendios provocados por diferentes tipos de materiales combustibles como papel o muebles.
Asimismo, la protección activa contra incendios funciona con sensores que detectan los niveles de calor y envían señales para apagar los suministros de energía o activar los rociadores cuando detectan altos niveles de calor.
Por ende, realmente se necesita un sistema de protección contra incendios si tiene material combustible en su edificio o si hay muchas personas que podrían resultar en peligro por un incendio, como niños o ancianos, de esta forma poder tomar las medidas preventivas en caso de altos riesgos.
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¿Cuáles son las causas comunes de incendios en un edificio?
En particular, los incendios son un problema grave que puede causar muchos daños en el edificio. Ya que existen muchas causas diferentes de incendios y la seguridad de protección activa contra incendios es un tema importante que debe abordarse.
Por este motivo, los edificios suelen estar en riesgo ya que pueden producirse incendios de muchas maneras si no se cuentan con las herramientas necesarias para extensión de incendios. Algunos factores influyen en los materiales de construcción, la antigüedad, que no se cuente con un sistema contra incendio y la falta de mantenimiento.
En la actualidad, los incendios en edificios son una de las causas más comunes de lesiones y muertes. Por ello es importante tomar medidas de precaución para reducir el número de incendios en un edificio con la protección activa contra incendios.
En general, los incendios son causados por errores humanos, cableado defectuoso o causas naturales como rayos. Pero, además la causa más común son los materiales para fumar descuidados que se desechan de manera incorrecta y provocan un incendio cuando se queman.
¿Qué provoca los incendios en un edificio?
- Fumar: Fumar es la principal causa de muerte por incendios en los Estados Unidos y Canadá. Se estima que representa alrededor de la mitad de todas las muertes por incendios residenciales cada año.
- Eliminación descuidada de materiales combustibles: esta es una de las causas más comunes de incendios en los edificios porque puede provocar fácilmente un incendio si no se maneja adecuadamente.
- Equipos defectuosos: Esto a veces conduce a incendios en el propio equipo porque cuando el equipo que funciona mal se encuentra con otros materiales combustibles, puede ser muy peligroso.
- Incendios en la cocina: Suelen ser causados por un cocinero o una persona que está cocinando que usa demasiado aceite, cocina demasiado los alimentos o deja que se acumule grasa en las sartenes.
- Incendios eléctricos: Este tipo de fuego es un cortocircuito que hace que una corriente eléctrica pase a través de la superficie de cocción, incendiando los alimentos.
- Incendios químicos: Suelen ocurrir cuando hay una fuga o derrame de un líquido o gas inflamable y no hay chispa para encender el fuego.
En conjunto, la protección activa contra incendios es la práctica de utilizar un sistema que detecta y evita que se produzcan incendios en un edificio o estructura. Los sistemas de protección activa contra incendios pueden detectar y extinguir pequeños incendios, evitando que se conviertan en grandes que podrían tener un mayor impacto en la vida humana y la propiedad.
Sistemas de protección activa contra incendios
En efecto, los sistemas de protección activa contra incendios tienen una variedad de clases, que se utilizan para proporcionar diferentes niveles de protección. Incluyen sistemas activos de control de humo, extintores de incendios de productos químicos secos y sistemas de rociadores.
Estos están diseñados para detectar, extinguir y proteger contra incendios, así que funcionan detectando un incendio y luego cortando el suministro eléctrico al área.
Además, la protección activa contra incendios se puede clasificar en tres categorías básicas: La detección de humo, llama y calor revelan el peligro de incendio. La suspensión de fuego es un resumen de las actividades que ayudan a apagar los incendios sin ponerse en peligro y la ventilación mecánica es una forma de garantizar la seguridad de las personas en un espacio afectado por fuego o humo.
Estos abarcan todos los procesos relacionados con la detección de humo, tanto la detección como la identificación, la eliminación, la notificación y la actuación.
Detectores
Los sistemas de protección activa contra incendios alertan a las personas sobre la presencia de humo, fuego y otras amenazas. Pueden ayudar a minimizar el daño y/o salvar vidas.
Hay varios tipos de detectores que ayudan a detectar ciertos fenómenos. Se clasifican en función de su caso de uso específico:
- Iónicos. Ven todas las partículas que salen del proceso de combustión (es decir, pueden detectar humo invisible).
- Ópticos. Cuando los sensores detectan humo visible/significativo, activa una alarma
- De temperatura. Los dispositivos proporcionan una manera conveniente de monitorear los cambios de temperatura y ayuda a evitar un accidente al saber cuándo la temperatura ha alcanzado niveles peligrosos.
- De radiaciones. Su capacidad para detectar tanto la radiación ultravioleta como las llamas es impresionante.
Las instalaciones fijas de detección de incendios son cada vez más populares. Esto puede ayudar a los bomberos a localizar incendios en áreas que antes eran inaccesibles para ellos. Por ello, es muy recomendable utilizar este tipo de tecnología de protección activa contra incendios.
Rociadores
Un rociador es un dispositivo que ha sido diseñado para liberar múltiples chorros de agua sobre una superficie en llamas.
Estos dispositivos pueden extinguir y controlar rápidamente un incendio, gracias a su capacidad para detectar el calor y apagarse cuando se alcanza la temperatura adecuada.
Existen rociadores automáticos que se pueden activar cuando sea necesario, liberando agua en un área designada en caso de emergencia. El sistema está protegido calentando el elemento por encima de su clasificación térmica para que el agua pueda descargarse.
Los rociadores están diseñados con tuberías subterráneas y aéreas, donde los rociadores de este sistema se descargan automáticamente de una manera que crea un patrón de distribución sistemático. Las profundidades del agua se calculan de antemano y pueden provenir de una o más fuentes de suministro.
Extintores
Los extintores son un tipo de herramienta de protección contra incendios que se utiliza para controlar incendios.
Hay algunas sustancias en las que algunos enfatizan que son seguras de usar, como el agua o los productos químicos. Algunos de estos productos se almacenan en cilindros o botellas, lo que puede ser complicado sin una contención adecuada.
Otro elemento a tomar en cuenta es el agente impulsor, es decir, el producto que contiene el extintor y que permite la proyección al exterior del agente extintor. El aire comprimido, el nitrógeno y el dióxido de carbono son algunos de los agentes más comunes para su contención
Por ende, donde se encuentran instalados deben tener revisiones anuales de extintores de incendios, y eso es necesario por motivos de la protección activa contra incendios. Asimismo, estar en buenas condiciones y de fácil acceso.
Los mejores extintores de incendios combinan la eficacia, que se refiere a qué tan bien el dispositivo puede extinguir incendios y la eficiencia, que se relaciona con la rapidez con que el dispositivo puede emitir un agente extintor de incendios.
Por esta razón. es importante tener sistemas protección activa contra incendios instalados en su hogar o negocio porque pueden ayudar a prevenir y mitigar la propagación de incendios.
Del mismo modo, son útiles para brindar seguridad a las personas que viven en un edificio o en un área. Además, que se pueden utilizar en entornos industriales como fábricas y almacenes para evitar la propagación de incendios.
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